La era digital ha traído evolución en todos los aspectos, pero quizá el más significativo es que ahora somos seres humanos interconectados por la tecnología. Casi sin darnos cuenta
estamos formando parte absoluta de una gran revolución y todos los aspectos de nuestro entorno avanzan al ritmo de la era digital. Uno de los elementos que está dando un giro de 180° es
la gestión de talento, los nuevos modelos de negocio y la nueva forma de trabajar (llamada
trabajo 3.0) están cambiando las dinámicas de trabajo de forma radical.
Talento conectado, una nueva forma de gestión de talento
La forma de gestionar el talento, ha dado un vuelco para imponer el modelo de desarrollo de
comunidades de talento interconectadas entre sí, que surgen de una sociedad hiperconectada, donde el conocimiento de los miembros de las organizaciones comparten “su talento” en el entorno 3.0.
Uno de los grandes avances de esta nueva tendencia de la gestión de talento es que el conocimiento va enriqueciéndose por las aportaciones de muchas mentes, perfiles, capacidades y habilidades diversas. La conectividad entre las personas es lo que permite crear nuevas soluciones de negocio mientras que esta
inteligencia colectiva, permite mejorar la efectividad de una empresa y potenciar su competitividad empresarial, sí como la calidad de sus productos y servicios.
Cómo trabaja el talento conectado
Los nuevos trabajadores 3.0 no sólo se caracterízan por la conectividad,
existen otras características comunes que definen al talento conectado o talento digital. Estos profesionales se desenvuelve en entornos virtuales, tienen valores y hábitos que les permiten
trabajar de forma autogestionada, eficiente y colaborativa en comunidades y equipos que tendrán como misión la creatividad, el aprendizaje y la innovación.
El cambio de paradigma en lo que se refiere a gestión de talento conectado, requiere de
directivos que sepan obtener ventajas de las nuevas herramientas de gestión digitales y las nuevas formas de trabajar. Líderes que desarrollen prácticas de trabajo remoto, para reducir costes de infraestructura, y para mitigar los efectos de la dispersión geográfica del talento.
Los gestionadores de talento de las empresas deberán ser los arquitectos de esta transformación que trae la revolución digital, pues además de los cambios en los procesos y en los modelos de negocios, son
los procesos de gestión del talento los protagonistas del nuevo entorno innovador. La lucha de las empresas por obtener más capacidad de adaptación y aprendizaje dará más valor al talento conectado como elemento clave de la competitividad empresarial.
Como potenciar el talento conectado
Reuniones de empresa
Una buena forma de mantener el talento conectado es mediante el establecimiento de reuniones informativas. En entornos virtuales lo ideal sería
usar las tecnologías para las reuniones de equipo, como por ejemplo videoconferencias en línea, donde se puedan compartir las lluvias de ideas, habilidades y conocimientos.
Creación de grupos de trabajo
Los equipos de trabajo en entornos remotos fomentan la colaboración y fluidez de las ideas.
El talento estará conectado, viajando de una persona a otra, por lo que el aumento de la productividad será mayor. La gestión de las tecnologías y la nueva forma de trabajar, exigen una cultura empresarial con nuevos modelos más participativos.
Fomentar las relaciones intergeneracionales
La cohesión entre personas de diferentes generaciones que permitan
enriquecer las experiencias de la comunidad de trabajadores, es una forma de desarrollar el talento conectado que pasa de una generación a otra. Del mismo modo, la formación más profesional y técnica de los más jóvenes, ayudará a las generaciones más antiguas a ponerse al día en los últimos avances relacionados con su trabajo. Es una comunicación bilateral en la que todos aprenden.
La empresas están cambiando para afrontar un entorno de ideas, talento y conocimiento que evolucionan en un ambiente digital a gran velocidad, aquellas organizaciones que incorporen el talento conectado
liderarán los cambios del futuro. Para las empresas que no consideran con urgencia avanzar en ésta materia, obligatoriamente deberán transformar su forma de pensar, sus hábitos y
formas de trabajar. para poder conseguir sus objetivos
requerirán un cambio cultural; ese será su gran reto.

La era de la digitalización ha traído a nuestros días la nueva forma de trabajar, el trabajo 3.0. En plataformas de trabajo como
Nubelo encontramos el talento mucho más profesional e interconectado, el profesional freelance, que pudiera decirse, - así como van las cosas –
será el talento que dominará el futuro.